Sal a caminar con tu familia. ¿Quién
puede escuchar el mayor número de sonidos
diferentes?
Pide a tu mamá y a tu papá que te ayuden
a descubrir quién, aparte de tu pastor, trabaja en tu
iglesia.
Agradece a Dios por el regalo de poder
escuchar.
A ZH
R O A
A ZH
Durante el culto familiar, lee la historia
de Samuel en 1 Samuel 3.
Pide a alguien que te ayude a buscar la
palabra «escuchar» en una concordancia bíblica.
Cuenta el número de veces que se menciona en la
Biblia esta palabra. Busca uno o dos versículos y
coméntenlos todos juntos.
Escribe con tus propias palabras el
versículo para memorizar.
A ZH
A ZH
L E E
Haz un móvil que se llame «Puedo
escuchar a Dios», recortando ilustraciones de
revistas o dibujando formas como Dios nos
habla hoy. Pégalas a trozos de hilo y ata los
hilos de un gancho o perchero de colgar ropa.
Pide a los miembros de tu
familia que te cuenten en qué formas Dios
les ha hablado a ellos.
A ZH
A ZH
Durante el culto familiar, piensa en cinco o
seis sonidos que puedas crear fácilmente. Por ejemplo,
darle vueltas a las páginas de un libro. Pide a tu familia
que cierre los ojos. Luego cuenten los sonidos que
pueden reconocer. Hablen acerca de las cosas que no
nos dejarían escuchar la voz de Dios.
Escriban juntos unos versos o un canto
acerca de escuchar a Dios.
Ora para que Dios te ayude a quitar
aquellas cosas que no te permiten escuchar su voz.
R O A
A ZH
A ZH
DABÁ
O
S
SENUL
ETRA
S
M
CRÉI
SELO
M
Samuel veía gente
perversa cada día, pero él
servía a Dios sin importarle
lo que los demás hacían.
Dibuja un par de orejas y recórtalas.
Escribe el versículo para memorizar en las siluetas
de las orejas. Anota o dibuja algunas cosas en la
parte de atrás, que muestren diferentes formas
como puedes escuchar a Dios. Coloca las siluetas
donde puedas verlas con frecuencia.
Siéntate muy quieto durante unos tres
minutos. ¿Qué escuchas?
Pide a Dios que te ayude a escuchar
su voz.
A ZH
A ZH
R O A
OGNIMOD
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