ACT I V I DADES PREL IMI NARES
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Seleccione la actividad o actividades que sean más apropiadas para su grupo.
LECCIÓN 4
Distracciones
Elija a una persona para que cuente hasta cincuenta,
mientras el resto de la clase repite toda clase de números a
fin de confundir a quien está contando. Repita el ejercicio
varias veces con diferentes alumnos contando.
Para reflexionar
Pregunte:
¿Cuán fácil o difícil se les hizo concentrarse
en su tarea? ¿Cómo se sienten respecto a esas
distracciones? ¿Fue esta experiencia semejante a orar
por ti mismo?
(Me distraigo fácilmente con las cosas que
me rodean; pierdo el hilo del pensamiento; no sé por qué
orar; me olvido de orar por otras personas.)
La Biblia nos muestra que es importante orar en
favor de los demás.
Leamos nuestro versículo para esta semana: «Señor,
Dios de Israel: ni en el cielo ni en la tierra hay un Dios
como tú, que cumples tu alianza y muestras tu bondad
para con los que te sirven de todo corazón»
1 Reyes 8: 23).
De hecho:
Orar por los demás es una forma de adorar a Dios.
Peticiones de oración
Pida a sus alumnos que se sienten formando un círculo.
Diga:
Voy a leer algunas peticiones de oración. Después
de cada petición, pónganse de pie si piensan que Dios le
va a conceder a dicha persona esa petición. Quédense
sentados si piensan que Dios no contestará esa petición.
Lea en voz alta:
1. Por favor consuela a mi tía porque se murió su esposo.
2. Por favor dame ropas nuevas.
3. Por favor ayúdame a salir bien mañana en mi examen de
ciencias.
4. Por favor perdona mis pecados.
5. Por favor ayúdame a obtener una buena calificación
en matemáticas aunque no haya estudiado.
6. Por favor ayuda a mi papá a venir a la iglesia y
a conocerte.
7. Por favor ayúdame a ser el mejor jugador de baloncesto
de mi escuela.
Para reflexionar
Pregunte:
¿Cuáles son las peticiones que implican en
forma automática una respuesta positiva?
(Aquellas cosas
que Dios ya ha prometido, tales como consuelo, perdón.)
¿Por qué piensan que algunas tendrían un «no»
automático?
(Son egoístas o dañan a alguíen.)
¿Cómo se
sienten cuando Dios responde «no» a sus oraciones?
¿Por qué piensan que contestará así?
(No es su voluntad,
no es lo mejor para mí, posiblemente necesito esperar.)
¿A qué cosas responde siempre con un sí? ¿Cuán
importante piensan que es orar por los demás?
Recuerden:
Orar por los demás es una forma de adorar a Dios.
Repitamos juntos nuestro versículo para esta
semana: «Señor, Dios de Israel: ni en el cielo ni en la
tierra hay un Dios como tú, que cumples tu alianza y
muestras tu bondad para con los que te sirven de todo
corazón» (1 Reyes 8: 23).
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