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DIVISIÓN DE ASIA PACÍFICO SUR
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LA RESPUESTA A LA ORACIÓN
Finalmente, un día el comandante lo mandó
a llamar y le dijo:
«Hablé con el comandante del batallón, y
hemos decidido no invertir tiempo ni recursos
en emprender acciones negativas contra usted,
así que le daremos una baja honorable».
Dwayne no podía creer lo que oía. Estaba
maravillado. Agradecido con Dios,
inmediatamente organizó un viaje a Filipinas
para evaluar la situación. Todas las puertas se
abrieron después de eso. En cuestión de meses,
alguien ayudó a financiar un pequeño
helicóptero. Invirtió sus ahorros y recibió
numerosas contribuciones provenientes de
fuentes inesperadas, que cubrían todas las
necesidades, inclusive los gastos de los viajes y
los aranceles para el helicóptero.
«Dios tenía todo previsto—dice
Dwayne—. No hubo necesidad de hacer
proyectos para recaudar fondos».
Actualmente, Dwayne tiene 39 años y junto
con su esposa Wendy, una enfermera misionera
que conoció en Filipinas, dirige el Servicio de
Aviación Médica Adventista de Filipinas
(PAMAS, por sus siglas en inglés), un ministerio
de apoyo a la iglesia que se vale de la aviación y
de la asistencia médica para difundir el evangelio.
«Han transcurrido diez años desde que
llegué aquí, y Dios ha sido fiel en proveer para
nuestras necesidades mes a mes —afirma
Dwayne—. Con su ayuda y bendición hemos
logrado expandirnos continuamente».
Desde la baja militar honorable hasta su
actual ministerio de aviación, Dwayne ha visto el
cumplimiento de Romanos 8: 28: «Sabemos,
además, que a los que aman a Dios, todas las
cosas los ayudan a bien, esto es, a los que
conforme a su propósito son llamados».
«Dios mueve todas las piezas y dispone
todo para que se cumplan sus propósitos —dice
Dwayne—. Simplemente, tenemos que esperar
con fe el cumplimiento de sus promesas».
Consejos para la historia
• Juntos pueden ver algunas fotos
relacionadas con esta historia en el enlace:
bit.ly/fb-mq.
CÁPSULA INFORMATIVA:
• La Asociación Central de Filipinas tiene
1.243 iglesias y una membresía de 173.392
personas. El país cuenta con una población de
20.659.232 habitantes, lo que representa un
adventista por cada 119 personas.
• En el año 1905, G. A. Irwin, presidente de la
Unión de Australasia, visitó Filipinas mientras
viajaba a la Asociación General, y recomendó
que los adventistas comenzaran a trabajar
en las islas enviando colportores a Manila. En
respuesta a esta recomendación, el australiano
R. A. Caldwell llegó a finales de ese mismo año
y vendió muchos libros de salud y religiosos en
español.
• En el año 1915, el pueblo de Filipinas escuchó
por primera vez el mensaje adventista en su
lengua nativa, el tagalo, por el filipino Bibiano
Panis. Lo que llevó a que a principios del año
1916, 104 personas fueran bautizadas y se
organizara una iglesia con 116 miembros.
• El explorador Fernando de Magallanes
desembarcó por primera vez en Filipinas en el
año 1521. El nombre de Filipinas proviene de
Felipe II, rey de España durante el siglo XVI,
cuando el país se convirtió en colonia española.
• Muchos filipinos tienen nombres en español
debido a un decreto español del siglo XIX que
les exigía usar nombres o apellidos españoles.
• Los filipinos suelen vestirse con sus trajes
nacionales en ocasiones especiales. Las mujeres
usan un vestido largo con falda acampanada y
mangas anchas; y los hombres usan pantalones
y un
tagalong barong,
que es una camisa
especial con mangas hechas de pulpa de piña.