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| Lección 5

Martes 29 de octubre

NEHEMÍAS ACTÚA

Aparentemente, el reproche a los nobles y los gobernantes: “¿Exigís in-

terés cada uno a vuestros hermanos?” (Neh. 5:7) no produjo los resultados

deseados. Por lo tanto, Nehemías no se detuvo allí, sino que siguió luchando

por los oprimidos. Podría haber dicho que trató de enseñarles a los nobles y

los gobernantes, pero no funcionó, por lo que se vio obligado a abandonar

el asunto. Al fin y al cabo, se estaba alzando contra los ricos y poderosos

de la nación. Pero no quedó satisfecho hasta implementar una solución al

problema; aunque se granjeó poderosos enemigos en el proceso.

LeeNehemías 5:7 al 12. ¿Cuáles son los argumentos deNehemías contra

loque estabapasando? ¿Quéusóparapersuadir al pueblode que enmiende

el error?

Nehemías llamó a una gran asamblea: todo el pueblo de Israel se reunió

para tratar este asunto. Lomás probable es que haya previsto la posibilidad

de que, cuando todos estuvieran presentes, los dirigentes se avergonzarían,

y hasta quizá temieran continuar con su opresión.

El argumento inicial de Nehemías se centró en la esclavitud. Muchos

de los judíos, probablemente Nehemías incluido, habrían comprado la li-

bertad de otros judíos sometidos a servidumbre por extranjeros. Ahora, les

preguntó a los nobles y a los gobernantes si les parecía aceptable comprar

y vender a su propio pueblo. ¿Tenía sentido que los israelitas compraran

judíos y les dieran libertad solo para que terminaran siendo esclavos de su

propio pueblo?

Los dirigentes no ofrecieron ninguna respuesta porque veían que este

argumento era razonable; por lo tanto, Nehemías continuó. Él les preguntó:

“¿No andaréis en el temor de nuestro Dios, para no ser oprobio de las na-

ciones enemigas nuestras?” (Neh. 5:9). Entonces, Nehemías admitió que él

mismo le había prestado dinero y grano a la gente. Al declarar “¡Dejemos

de cobrarles intereses!” (Neh. 5:10, RVC), confirmó la ley que prohibía esta

práctica con sus hermanos hebreos y demostraba que, bajo su cargo de go-

bernador, le gustaría que fueran solícitos unos con otros. Increíblemente,

la respuesta fue unánime. Los líderes aceptaron devolver todo al pueblo.

¿Le has hecho mal a alguien? La mayoría, si somos honestos, tendríamos que res-

ponder “Sí”. ¿Qué te impide, de una u otra forma, hacer restitución, incluso ahora

mismo?