está en 1 Crónicas 16:27, en el canto de David que alaba a Dios cuando el Arca
del Pacto se coloca en el Tabernáculo: “Alabanza y magnificencia delante de él;
poder y alegría [
khedwah
] en su morada”.
La Fiesta de las Trompetas comenzaba al sonar del
shofar
(cuerno de carnero),
que marcaba el comienzo de la preparación para el Día de la Expiación; por lo
tanto, era un tiempo (diez días) de introspección y arrepentimiento.
Sin embargo, Esdras y los levitas le dicen al pueblo que debe dejar de la-
mentarse y llorar porque el día es santo. Esdras le dice al pueblo que el gozo
que viene del Señor es su fortaleza y su refugio. Si quieren estar firmemente
establecidos y fuertes, necesitan tener el “gozo de Jehová”. Observa también que
la santidad y el gozo van juntos. La alegría vino como resultado de comprender
que fueron perdonados por Dios. Este gozo de Jehová debía demostrarse co-
miendo y bebiendo con sus familias, disfrutando de la comida y de la comunión
mutua. Además, debían compartir la comida con aquellos que no tenían nada
preparado para una fiesta. Hubo tiempo para la introspección durante los diez
días previos al Día de la Expiación. Sin embargo, Esdras quiere que el pueblo
entienda que el arrepentimiento no es lo único necesario. Regocijarse por lo que
Dios ha hecho para proveer la salvación es igualmente importante. No debían
olvidar de la promesa de salvación, sino regocijarse por ello.
APLICACIÓN A LA VIDA
Esdras le enseñó al pueblo que la fuerza para la vida diaria es el resultado
de gozarse en el Señor. Este precepto casi parece demasiado simple. ¿Cómo
podría ser que la solución más importante para nuestros problemas diarios sea
regocijarnos en el Señor?
Cuando nos centramos en gozarnos en el Señor sin importar lo que esté
sucediendo en nuestra vida, confiamos en que él es lo suficientemente grande
como para encargarse de nuestros problemas. Esa confianza en Dios nos eleva y
nos da valor para enfrentar el día. Nos impide estar deprimidos y sentir lástima
por nuestras circunstancias. En cambio, nos mantiene enfocados en lo que Dios
puede hacer y lo que ya ha hecho por nosotros en la Cruz.
1. Piensa en personajes bíblicos que pasaron por circunstancias difíciles en
su vida y, sin embargo, pudieron ver que Dios los condujo en medio de
sus problemas. ¿Qué podemos aprender de cada caso?
2. ¿Cuán importante es nuestra actitud? Viktor E. Frankl, un sobreviviente del
Holocausto y psicólogo austríaco, escribió: “Al hombre se le puede arreba-
tar todo salvo una cosa: la ultima de las libertades humanas –la elección
de la actitud personal ante un conjunto de circunstancias– para decidir su
propio camino” (
El hombre en busca de sentido
, p. 71). ¿Están de acuerdo
o en desacuerdo con su declaración? Analicen. ¿Por qué la actitud marca
una diferencia tan grande en nuestra vida?
Lección 6
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Material auxiliar para el maestro
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