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| Lección 3

Miércoles 16 de octubre

LA ELECCIÓN DE DIOS

Se habla mucho de que Dios nos elige o nos escoge para hacer algo. Hay

muchas ideas diferentes sobre lo que significa esa elección. ¿Qué dice la

Biblia?

Lee Romanos 8:28 y 29. ¿A qué nos llama Dios? ¿Para qué nos elige?

Este pasaje declara específicamente que Dios predestinó a los seres

humanos a ser transformados a la imagen de su Hijo. No está diciendo que

Dios nos predestine a ser salvos o condenados, ni que no tengamos opción

en este asunto. En otras palabras, la elección es con el propósito de trans-

formarnos. Debemos ser transformados para reflejar al Hijo de Dios. Esta

transformación se promete luego en el siguiente versículo (Rom. 8:30), en el

que Pablo, el autor, afirma que aquellos a quienes Dios llama también justi-

fica y glorifica. Por lo tanto, la transformación no queda en nuestrasmanos,

sino que Dios promete lograr esta transformación mediante su poder.

Lee Romanos 9. ¿Qué tipo de elección o llamado de Dios se describe en

este capítulo?

En Romanos 9, Pablo aborda la elección de Dios para una tarea especí-

fica. Los israelitas fueron elegidos para llevar las buenas nuevas de Dios

al mundo. La frase “a Jacob amé, mas a Esaú aborrecí” (Rom. 9:13) común-

mente se malinterpreta como que Dios amó solo a uno de los hermanos.

Sin embargo, en el contexto de este pasaje, Pablo está diciendo que Jacob

fue elegido; pero Esaú, no. ¿Para qué fue elegido Jacob? Para ser el padre de

la nación israelita. Por lo tanto, hay dos tipos de elección. En primer lugar,

Dios nos elige a cada uno de nosotros para la salvación y quiere que seamos

transformados a la imagen de Jesús. En segundo lugar, Dios elige diferentes

personas para tareas específicas.

¿Por qué debería ser alentador saber que fuiste predestinado para la salvación?

Sin embargo, eso no significa que tus elecciones no puedan hacer que pierdas la

salvación que Dios ofrece. ¿Por qué?