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AP L I CANDO LA L ECC I ÓN

Explorando la Biblia

Forme cuatro grupos de alumnos.

Asigne uno de los Evangelios a cada grupo.

Diga a sus alumnos:

La sabiduría de Salomón es en

realidad la sabiduría de Jesús. Busquen en el Evangelio

asignado a su grupo una o dos ocasiones en que Jesús

usó su sabiduría para resolver problemas, o para

responder a sus enemigos. Al leer, busquen tres cosas:

1. Quién estaba allí

(por lo general fariseos, saduceos,

maestros de la ley, frecuentemente sus discípulos, personas

que él sanó o ayudó) y qué dijo o hizo Jesús (sanó en el día

sábado, salvó a María Magdalena de que la apedrearan,

aceptó el ungimiento de María, contó la historia del buen

samaritano, etc.)

2. En qué forma pueden haber sido afectadas las

personas involucradas

(endurecieron su corazón hasta

darle muerte; Nicodemo se convirtió; los discípulos

finalmente comprendieron lo que significaba su misión de

Mesías; María lo vio después de su resurrección; etc.)

3. Cómo se manifestó la sabiduría de Jesús y cómo

benefició a la gente que escuchaba

(relató historias; se

alejó silenciosamente cuando sus enemigos se enojaron;

hizo preguntas de tal manera que sus oyentes no pudieron

evitar sentirse convencidos de pecado, a menos que lo

hayan resistido; comprensión de la forma como funcionaba

su reino, etc.)

Cuando todos hayan terminado, pida a los grupos que

informen sus resultados al resto de la clase.

Digamos juntos el versículo de memoria de esta

semana: «Más bien sírvanse los unos a los otros por

amor» (Gálatas 5: 13).

Sabios como Salomón

Forme tres grupos con sus alumnos.

Anote en el pizarrón, lea o distribuya

copias de los siguientes escenarios:

1. Dos chicos aseguran que el reloj que llevas puesto

es de ellos. Cada uno lo reclama como suyo, ¿a quién se

lo darían?

2. Un día desaparece la merienda que llevas a la escuela.

Se lo dices a los maestros, pero te contestan que no hay

nada que puedan hacer hasta que no se descubra a la

persona culpable. ¿Cómo puedes ayudarles a descubrir

quién es?

3. Observas que durante un examen, el alumno que está

sentado a tu lado está leyendo un papelito con las

respuestas del examen anotadas en él. ¿Cómo reaccionarías

en una forma prudente?

Diga a sus alumnos:

Sus grupos deben pensar como

Salomón, a fin de encontrar soluciones a los problemas.

Anoten las soluciones para que puedan darlas a conocer

al resto de la clase.

Para reflexionar

Después de que los grupos hayan presentado sus

soluciones, compárenlas con las de Salomón y pregunte:

¿En qué es igual o diferente a lo que Salomón tuvo que

hacer?

(Difícil saber lo que es verdad o justo, juzgar a otra

persona.)

Recuerden, nuestro mensaje es

Revelamos el amor de Dios cuando servimos

a los demás con justicia.

NECESITA:

Biblias

39

NECESITA:

pizarra metálica

marcadores

copias de escenarios