C
es por el Comportamiento cristiano
El dominio propio es necesario para evitar comportamientos que destruyan la
salud. El alcohol, el tabaco y otras sustancias son engañosos porque se promueven
como diversión, estimulantes y relajantes de tensión y dolor, pero consumirlas es
fatal para nuestra salud. Vivir siguiendo el ejemplo de Cristo, imitando su
comportamiento, implica una vida libre de vicios y adicciones.
I
es por Integridad
Es fácil negar los daños causados por comportamientos que perjudican la salud.
Necesitamos aprender a ser honrados con nosotros mismos y con la gente para
ganar su confianza y desarrollar buenas relaciones. Celebra la integridad y las
conexiones sociales por sus contribuciones a tu salud mental, física, y espiritual.
O
es por Optimismo
El optimismo se construye sobre la esperanza en Dios y la confianza en que
obra para nuestro bien. El optimismo es la cara de la fe que ilumina la vida. Una
actitud optimista nos permite reír, y es la medicina más poderosa. ¡Celebra cada
día para preservar tu salud mental y la vida!
N
es por Nutrición
I Alimentarse bien es comer cereales integrales, granos, semillas y coloridas
frutas y verduras. Disfruta con la semillas de sabor agradable, y las legumbres
(frijoles, habichuelas, y lentejas). ¡A cada comida, piénsala como un festival! ¡Piensa
en celebración!
E
es por Espiritualidad
Dios nos creó con un cuerpo perfecto. «Tú fuiste quien formó todo mi cuerpo;
tú me formaste en el vientre de mi madre. Te alabo porque estoy maravillado,
porque es maravilloso lo que has hecho» (Salmo 139: 13, 14). Cuando cuidamos
la salud física y espiritual de nuestro cuerpo, este cumple el propósito para el cual
fue diseñado, como templo del Espíritu Santo. «¿Acaso no saben ustedes que son
templo de Dios, y que el Espíritu de Dios vive en ustedes?» (1 Corintios 3: 16).
Celebra tu vida espiritual. Celebra la creación maravillosa que eres.
S
es por Ser Mayordomo
La buena salud es un regalo de Dios, y si se invierte en conservarla, progresará;
pero si se desperdicia, se pierde para siempre. Invierte en un futuro saludable
aceptando y alabando a Dios por sus regalos que conservan la buena salud.
¡RECRÉATE EN ESTAS COSAS BUENAS!
¡DISFRÚTALAS! ¡SÉ AGRADECIDO!
(Adaptado de «¡Llena tu vida de CELEBRACIONES!»
Health Connection
[Hagerstown, 2000]. Usado con permiso.)
LECCIÓN 6
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