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Roboam escuchó atentamente las
palabras de sabiduría de su padre, que
además estaban llenas de amor. Salomón
añadió:
—No olvides mis enseñanzas, hijo mío;
guarda en tu memoria mis mandamientos, y
tendrás una vida larga y llena de felicidad. No
abandones nunca el amor y la verdad; llévalos
contigo como un collar. Grábatelos en la
mente, y tendrás el favor y el aprecio de Dios y
de los hombres. Confía de todo corazón en el
Señor y no en tu propia inteligencia. Ten
presente al Señor en todo lo que hagas, y él te
llevará por el camino recto (Proverbios 3: 1-6).
Cuida tu mente más que nada en el mundo,
porque ella es fuente de vida (Proverbios 4:
23). Pon tus actos en las manos del Señor y tus
planes se realizarán (Proverbios 16: 3). Más
Lunes
LEE
Proverbios 22: 3.
BUSCA
el significado de las palabras «discernimiento»,
«prudencia», «discreción» y «juicioso».
ANOTA
las definiciones en tu lección.
UTILIZA
las palabras formando una oración (exprésalo en
voz alta si no deseas escribir). Revisa con un adulto para ver si
las usas y comprendes correctamente.
REPASA
el versículo para memorizar.
PIDE
ayuda a Dios para entender y practicar lo que aprendas
en esta semana.
Domingo
LEE
Proverbios 22: 1 y el relato de esta semana «Palabras
dignas de un rey».
APRENDE
Empieza a aprender el versículo.
REPASA
el versículo para memorizar.
ALABA
a Dios por las diferentes maneras como cuidó de ti la
semana pasada.
Martes
LEE
Proverbios 22: 1-5.
HAZ
una lista en tu lección de cuatro clases de personas a
quienes se dirigen los Proverbios de Salomón. Junto a cada
grupo, anota qué es lo que cada uno recibe por prestarles
atención.
PIENSA
¿A qué grupo o grupos crees que perteneces tú?
REPASA
el versículo para memorizar.
CONVERSA
con Dios respecto a formar parte de uno o más
de estos grupos.