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Lección 2 | Lunes 7 de octubre
LA ORACIÓN DE NEHEMÍAS
Lee laoracióndeNehemíasque se encuentraenNehemías 1:5al 11. ¿Cuá-
les son los diferentes componentes de la oración? ¿Por qué en la oración él
mismo se incluye entre los culpables?
1. Dios, eres grande y misericordioso (Neh. 1:5).
2. Escúchame (Neh. 1:6).
3. Confesión de pecados (Neh. 1:6, 7).
4. Recuerda tus promesas (Neh. 1:8, 9).
3. Nos has redimido (Neh. 1:10).
2. Escúchame (Neh. 1:11).
1. Dios conceda prosperidad y misericordia (Neh. 1:11).
La oración deNehemías es una bella composición que narra la grandeza
de Dios, la pecaminosidad del pueblo, y concluye con un clamor de ayuda.
La oración se asemeja a la oración de Daniel en Daniel 9, y es posible que
Nehemías estuviese familiarizado con esa oración. Cabe destacar queNehe-
mías no comienza con un grito de ayuda, sino que primero declara la verdad
acerca de quién es Dios, grande y temible. También recalca que Dios cumple
con su pacto y tiene misericordia de los que lo aman, como si le recordara
a Dios que siempre ha sido fiel y que ahora no puede ser de otra manera.
La oración tiene una estructura especial (representada arriba) que se
centra en el versículo 8, donde Nehemías articula las promesas de Dios. Ne-
hemías dice: “¡Recuerda!” En otras palabras:
Recuerda, Dios, que prometiste
que nos dispersarás cuando seamos infieles, pero que tambi n prometiste
traernos de vuelta y restaurar todo. Dado que lo primero ya ocurrió, ahora es
el momento de cumplir con el resto, porque estamos volviendo a ti.
Nehemías
no temió reclamar las promesas de Dios y recordárselas. Por supuesto, no es
que Dios no conozca ni recuerde sus promesas. Dios se complace en nuestra
disposición a reclamar sus promesas. Él quiere que creamos en ellas y que
se las expresemos en voz alta. Al verbalizar lo que Dios nos prometió, nos
fortalecemos en nuestra determinación de confiar en esas promesas, espe-
cialmente en momentos en que todo parece desalentador.
¿Cuáles son algunas de las promesas de Dios que puedes reclamar ahora mismo?
¿Por qué es importante no renunciar nunca a reclamar esas promesas? (Al fin y al
cabo, si nos rendimos, ¿qué nos queda?)