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| Lección 12

Martes 17 de diciembre

ESDRAS REACCIONA

Lee Esdras 9. ¿Cómo responde Esdras al enterarse de los matrimonios

mixtos de los israelitas? Esdras 9:1 y 2 expresa que las personas “no se han

separado”. La palabra “separado” también se usa en los siguientes versícu-

los: Levítico 10:10; 11:47; Éxodo 26:33; Génesis 1:4, 6, 7, 14, 18. ¿Qué implica el

uso de esta palabra en relación con el tema de un creyente que se casa con

un incrédulo?

El pueblo se acercó a Esdras con la cuestión del matrimonio mixto. La

terminología que usaron para enumerar a las naciones incluidas en abomi-

naciones demostraba que conocían la Torá, ya que la lista se toma directa-

mente de los relatos bíblicos. Curiosamente, los dirigentes civiles llevaron

las noticias a Esdras, ya que hasta los líderes espirituales de la nación, los

sacerdotes y los levitas, eran culpables de esta transgresión.

“En su estudio de las causas que condujeron al cautiverio babilonico,

Esdras habia aprendido que la apostasia de Israel se debia en gran parte al

hecho de que se habia enredado con las naciones paganas. El habia visto

que, si hubiesen obedecido la orden que Dios les diera, de mantenerse se-

parados de las naciones circundantes, se habrian ahorrado muchas expe-

riencias tristes y humillantes. De manera que, cuando supo que a pesar de

las lecciones del pasado hombres eminentes se habian atrevido a trans-

gredir las leyes dadas para salvaguardarlos de la apostasia, su corazon se

conmovio. Penso en la bondadmanifestada por Dios al dar a su pueblo otra

oportunidad de establecerse en su tierra natal, y quedo abrumado de justa

indignacion y de pesar por la ingratitud que revelaban” (

PR

416-417).

La palabra “separados” se usa para entidades contrastantes; de hecho,

denota opuestos totales. Con esta declaración, el pueblo reconoció que tenía

conocimiento previo y que entendía el mandato de Dios demantenerse ale-

jados de las religiones falsas. Entendían que nadie podía decir que se casaría

con alguien cuyas creencias contrastantes no tendrían ningún impacto

en la relación matrimonial o en la crianza de los hijos. Comprendían cuán

grave se había vuelto la situación.

¿Qué podemos hacer para tratar de mantener viva la fe en nuestros hogares y

familias, aunque en el pasado hayamos tomado decisiones erradas?